Mejora el marketing de tu iglesia creando un avatar en vez de un público

¿Quieres desarrollar una estrategia de marketing de contenido y comunicación asertiva para tu ministerio digital? Si es así, lo primero que debes hacer es enfocarte en conocer muy bien a quién quieres inspirar.

Tabla de Contenidos

Si buscas inspirar con la Palabra de Dios y tu testimonio de vida, necesitas identificar a quien te vas a dirigir.

Al pensar en ello, puede parecer todo un reto. Pero cuando lo hayas identificado, sabrás cómo segmentar, conocer y empatizar con tu audiencia para inspirarla de forma asertiva con tu ministerio.

Pero debo aclararte que pueden existir muchas personas con intereses y necesidades diferentes. Y aquí es donde cobra la importancia de la creación de un avatar.

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¿Qué es un avatar?

Aunque no conozcas el concepto, seguro que te haces una idea de lo que es por la película que lleva su nombre. Pero no te vayas a confundir. Mejor continúa leyendo este post porque vamos a definirlo de forma sencilla.

El avatar es un término utilizado en el marketing para representar a tu audiencia ideal. En otras palabras, esta representación te ayudará a definir las características de una persona simulando a una real.

No es lo mismo decir que mi audiencia es “todo el mundo” que decir son jóvenes cristianos con deseos de emprender. O decir, específicamente: son jóvenes de 21 a 30 años. Profesionales en búsqueda de levantar su propio emprendimiento, y enfrentándose al temor y a los nuevos desafíos que le da la vida. 

Como ves, el avatar es la representación que está basada en datos reales sobre el comportamiento y las características demográficas de la audiencia, así como en una creación de sus historias personales, motivaciones, objetivos, retos y preocupaciones.

¿Te imaginas crear contenidos pensando en una persona en especial? Sería más fácil, ¿verdad? Entonces el ejercicio que debes hacer es imaginar realmente a una persona y a ella hablarle. 

Cuánto más claro sea avatar, podrás determinar el tipo de contenido que necesita tu ministerio para lograr tus objetivos de comunicación.

¿Suena bien? Pues, si quieres ponerte manos a la obra, sigue leyendo.

¿Cómo diseñar un avatar para mi ministerio?

Si en este momento tienes identificado el público objetivo de tu ministerio digital, seguramente lo has descrito con las cualidades de edad, género, lugar, etc. Un ejemplo podría ser “mujeres de 25 a 40 años”.

Con esta información de base, mira qué grupos de personas comparten rasgos de comportamientos similares. Al tener este grupo identificado, analiza si tus más fieles seguidores o miembros de tu comunidad, también comparten estos rasgos de comportamiento. Así es que descubres los perfiles ideales. Siguiendo el ejemplo, podría ser “mujeres cristianas, casadas, de 25 a 40 años. Madres de niños o adolescentes”.

Ahora es el momento de analizar los perfiles, e identificar si hay un tipo de personalidad que los diferencia, Así descubrirás tu buyer persona. Un ejemplo sería: “mujeres cristianas, casadas, de 25 a 40 años, que son madres de niños o adolescentes. Que se enfrentan a combinar su rol de esposa, empleada, emprendedora, con el de ser madre y sembrar valores en sus hijos”.

Con el buyer persona creado, vas a estudiarlo para saber qué sueña, qué miedos tiene, con qué pensamientos se identifica… De esta manera estarás pasando de tener un público objetivo a crear tu propio avatar.

¿Cómo hacer que mi avatar se sienta identificado con mi ministerio?

Para asegurar que los esfuerzos de marketing de contenido de tu ministerio generen conexión y sentido de pertenencia, realiza preguntas que te permitan acercar a descifrar esa persona y sus necesidades. En este ejercicio no se trata de inventarse al tipo de persona que vas a inspirar, sino investigar y crear un avatar de esa persona.

Te resultará más fácil definir el avatar para tu ministerio haciéndote preguntas como estas:

1. ¿Quién es él o ella? ¿Cómo vive esta persona?

Trata de investigar la mayor cantidad de información posible sobre la vida de aquellos a los que estás intentando llegar. Averigua su origen socioeconómico, composición familiar, metas profesionales, etc.

2. ¿Cuál es la necesidad de la persona? 

Es habitual mirar a las personas y creer que solo necesitan una relación con Cristo y aplicar la verdad bíblica a su vida. Es probable que sea cierto, pero debes disciplinarte para mirar según las necesidades de tu audiencia desde la perspectiva de ellos. 

3. ¿Por qué esta persona sigue mi cuenta? ¿Qué busca?

Piensa en qué tipo de contenido prefiere esta persona. Sé lo más específico posible. También es posible que te ayude saber qué cuentas de redes sociales sigue.

Ahora, cabe aclarar que es posible tener varios tipos de avatar. Una iglesia puede tener hombres, mujeres y jóvenes, pero no puedes ignorar que cada uno de ellos tiene características claves y necesidades que los diferencia.

Desarrolla tu plan de contenidos dirigido a tu avatar

Ahora que sabes a quién te vas a dirigir, podrás inspirarlo con mensajes que están necesitando. Tú eres la luz para iluminar su camino a Jesús. Solo debes conocerlos y desarrollar contenidos con el lenguaje apropiado para ellos.

¿Tu avatar está fuera del entorno cristiano? Entonces te recomendamos:

  • Evitar el lenguaje religioso. 
  • Amoldar el lenguaje y las acciones de acuerdo a la audiencia que quieres conquistar. 1 co 9:20-22
  • Hablar con un tono religioso con los que no conocen de Cristo, es como si hablaras en español a quienes solo entienden chino.
  • Presentar soluciones a problemas reales.

Piensa: ¿Qué puedes hacer que haga a la gente sentirse mejor y que le facilite la vida? 

  • Imitar la forma en que Cristo enseñaba sobre el Reino de los Cielos con herramientas sencillas como el storytelling y las metáforas

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  • Personalizar tu contenido. Aunque tengas centenas o miles de seguidores, personaliza tu comunicación. Recuerda que en las redes sociales las personas vemos individualmente.

Sé que no quieres perder el tiempo y empezar a inspirar a tu audiencia a seguir a Cristo, pero para lograrlo a través de las redes sociales debes construir una comunidad y asegurarte que tus contenidos cautiven a tu avatar. Y nosotras podemos ayudarte a lograrlo en el entrenamiento gratuito de Instagram para iglesias y ministerios digitales. 

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